martes, 6 de marzo de 2012

Inside man. (El Plan perfecto)

Colgarme en vacaciones no me cuesta. Asi que pido disculpas si alguien esperaba una actualización y lo dejé plantado.
Esta vez subo una peli que vi porque me prestaron...no es de esas que me llaman poderosamente la atención ni mucho menos, pero esta buena. Si algo puedo criticar es los buenos actores (buenos buenos) que usaron por 10 minutos. Quizás era la idea..pero a mi no me cabió.
También me aburre ver a Denzel encasillado en el personaje del poli cuestionado, honesto pero mediocre...En fin, ustedes dirán.
Si me encantó el papel y actuacion de clive Owen.
FICHA TÉCNICA:
Titulo original: Inside man (el plan oculto)
Dirección: Spike Lee.
País: USA.
Año: 2006.
Duración: 129 min.
Género: Drama, thriller.
Interpretación: Denzel Washington (Detective Keith Frazier), Clive Owen (Dalton
Russell), Jodie Foster (Madeline White), Christopher Plummer (Arthur Case),
Willem Dafoe (John Darius), Chiwetel Ejiofor (Detective Bill Mitchell), Kim
Director (Stevie), James Ransone (Steve-O), Peter Gerety (Capitán Coughlin),
Victor Colicchio (Sargento Collins), Peter Frechette (Peter).
Guión: Russell Gewirtz.
Producción: Brian Grazer.
Música: Terence Blanchard.
Fotografía: Matthew Libatique.
Montaje: Barry Alexander Brown.
Diseño de producción: Wynn Thomas.
Vestuario: Donna Berwick.
SINOPSIS: (robada de otro blog)
Historia del enfrentamiento entre un duro policía (Denzel Washington) y un inteligente atracador (Clive Owen), durante un tenso secuestro con rehenes en un banco de Manhattan. Según se desarrolla el peligroso juego del gato y el ratón, aparece una tercera persona, contratada por el influyente hombre de negocios dueño del banco (Christopher Plummer). Se trata de Madaline (Jodie Foster), una poderosa bróker y con una agenda secreta que inyecta otra dosis de inestabilidad a una situación muy volátil.
SINONPSIS EXTENDIDA (LA BUTACA)

Todo empieza de la forma más simple: cuatro personas vestidas con
monos de pintores en-tran en el concurrido vestíbulo de la sucursal de Wall
Street del conocido banco Manhattan Trust. En cuestión de segundos, los cuatro
fal-sos pintores, basándose en un plan estudiado al milímetro, contro-lan la
sucursal, y toman como rehenes a cincuenta personas entre clientes y personal.
Dos negociadores especializados en toma de rehenes pertenecientes a la policía
de Nueva York, los detectives Keith Frazier (Denzel Washington) y Bill Mitchell
(Chiwetel Ejiofor) reciben la orden de entablar negociaciones con el líder de
los atra-cadores, Dalton Russell (Clive Owen), y conseguir la liberación de los
rehenes. La Unidad de Servicios de Emergencia (ESU) repre-sentada por el capitán
John Darius (Willem Dafoe) les presta su apoyo y todos están convencidos de
poder resolver la situación con relativa rapidez y recuperar el control del
banco. Pero nada saldrá como está planeado. Dalton Russell demuestra ser un
oponente brillante, inteligente, frío y calculador, un auténtico maestro de
ma-rionetas cuyo plan ha sido cuidadosamente diseñado para deso-rientar a los
rehenes y a las autoridades. Los superiores del detec-tive Keith Frazier
empiezan a poner en duda su capacidad para re-solver la situación pacíficamente.
Los atracadores siempre parecen llevar la delantera a la policía, burlándose de
los dos negociadores. Las sospechas del detective Frazier de que todo esto
esconde algo más se ven corroboradas cuando aparece Madeline White (Jodie
Foster), una influyente mujer con objetivos nada claros, que pide ver
personalmente a Dalton Russell. El presidente del consejo del banco, el poderoso
empresario Arthur Case (Christopher Plummer) también se interesa sobremanera por
el desarrollo de la crisis. Pe-ro, ¿exactamente qué quieren los atracadores?
¿Por qué no hay nada que mitigue la crisis que se alarga hora tras hora? El
detecti-ve Frazier está convencido de que alguien maneja los hilos y de que hay
negociaciones secretas, pero el polvorín es más inestable cada segundo que pasa.
Obligado a cuestionar sus lealtades y sus motivaciones, el detective se arriesga
y entra de lleno en un juego de reglas inestables en el que bastaría un
movimiento equivocado para que el polvorín volara por los aires.

De todo un poco...